El jueves 18 de julio tuvimos el gran honor en la sede Buenos Aires de dar por finalizada la VI edición del Programa Jóvenes Dirigentes.
Este año no fue uno más para Frente Joven Buenos Aires ya que Jóvenes Dirigentes contó con la asistencia de más de 45 alumnos que clase tras clase buscaron aprovechar todas las herramientas que este proyecto les ofrece para convertirse en dirigentes con plena conciencia del Bien Común.
Además, tuvimos el enorme prestigio de poder desarrollar nuestro programa nada más ni nada menos que en uno de los centros institucionales más significativos de nuestra República: el Honorable Senado de la Nación. Y para no ser menos, el cierre fue a todo trapo, ya que comenzó con el encuentro de primer nivel que los alumnos de JD mantuvieron con el diputado nacional Nicolás Massot (jefe del bloque Pro en la Cámara Baja); a eso le siguió el acto académico en el que se destacaron los discursos -tan prolijos como entusiastas- de dos egresados (Luciana Pinasco y Juan José Alonso); para luego culminar con la entrega de diplomas que este año contó con la presencia del senador nacional Dalmacio Mera y la diputada nacional Carla Pitiot. Finalmente –y como no podía ser de otra forma- tanto sacrificio fue coronado con un divertidísimo after en “Jobs” que se prolongó hasta horas de la madrugada.
Hasta aquí la modesta y sucinta crónica de lo que fue el cierre de una nueva edición de Jóvenes Dirigentes. Ocasión que nos permite, aunque de manera muy breve, reflexionar sobre la importancia que tiene la propuesta académica de JD. En efecto, es estimulador cómo los alumnos han agradecido tanto la oportunidad de poder interactuar con ministros y legisladores que comparten su experiencia en la función pública; como la posibilidad de conocer mejor la esencia del verdadero liderazgo, la historia de nuestro País, los problemas y desafíos estratégicos del Estado, entre otros temas. Elementos todos que contribuyen -sin duda alguna- a formar dirigentes con la lucidez y el coraje necesarios para trabajar por una sociedad más digna.
Por último, no podemos dejar de destacar el compromiso de los profesores, que con su sabiduría y ejemplo trazan el “espíritu” de nuestro programa de formación, al mismo tiempo que reconocer la enorme tarea del equipo de voluntarios de este proyecto que soñó, planificó y dejó todo en la cancha para que Jóvenes Dirigentes sea una realidad. Esa realidad que le permitió a 45 jóvenes abrirles un poquito la cabeza y ensancharles el corazón para que su vocación de servicio pueda ser desarrollada en plenitud por el bien de Argentina.
Enzo Di Fabio
Director Jóvenes Dirigentes Buenos Aires